febrero 9, 2025
PALENQUE:  MINERÍA Y PUEBLOS AFRODESCENDIENTES EN AMÉRICA LATINA

PALENQUE: MINERÍA Y PUEBLOS AFRODESCENDIENTES EN AMÉRICA LATINA

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La introducción en América de africanos a través del mercado esclavista, para satisfacer las necesidades crecientes de la industria minera y agrícola empezó en la época colonial y las expresiones de racismo ambiental y discriminación se han expresado a lo largo de la historia a través del despojo de tierras y desalojo de forma violenta, entre otras formas de exclusión social.

Msc. Iris Pico Arregui y P. Mossi Kauni Amomo

Es notoria la presencia de deterioro ambiental en los territorios que comparten los afrodescendientes con campesinos o pueblos originarios, en los que existe efectos negativos en la salud, las necesidades y carencias en las regiones y asentamientos de estos pueblos invisibilizados desde su propia identidad; sin embargo han logrado juntar sus deseos y profundas necesidades con la comunidad para defender los territorios de la creciente industria extractivista. Intentamos dar unas pautas para que cada cual profundice.

En la época de coloniaje, los reyes españoles, a causa de la demanda de mano de obra para las minas y producción agrícola de caña de azúcar, se vieron en la necesidad de importar “negros” africanos a sus colonias. La causa de la demanda de mano de obra fue porque los pueblos originarios sometidos a innumerables vejaciones empezaron a diezmarse.

Esta necesidad fue el motor para desplazar negros esclavos hacia América. Este era un “producto” apetecido para aumentar la extracción de plata y oro, abundantes en Zacatecas, México y Centro América, lugares que constituían el Virreinato de Nueva España en el norte, en el sur el Virreinato del Perú conformado por lo que hoy es Bolivia, Ecuador, Colombia, Chile y Argentina.

En Ecuador la mina colonial más importante fue en Zaruma al sur del país, donde se introdujeron esclavos negros. También en la provincia de Esmeraldas particularmente en la zona norte a lo largo de los ríos Santiago, Wamba, Tululbí, Cayapas, etc. Esta provincia hoy es diezmada por la minería aurífera legal e ilegal.

Existe una resistencia organizada de los pueblos afroecuatorianos para defender lo que queda de biósfera natural, pero las condiciones de racismo estructural y ambiental hace que exista confrontación entre comunidades por la minería, y despojo de su territorio ancestral. (Moreno: 2019).

En 1575 se abrieron por primera vez las minas de Potosí al sur de Bolivia, y para el siglo XVII introdujeron negros esclavos del Congo constituyéndose los denominados Yungas de Bolivia. Hoy los afrodescendientes que quedaron en Bolivia se ubican principalmente al norte en “los Yungas”.

El descubrimiento de minas de oro en Potosí requirió tratados de libre comercio, e importación de esclavos negros traídos en particular del Congo, África. Los puertos principales en los dos virreinatos de México y Perú con el fin de embarcar el mineral obtenido (Chaín:2013), actividad que también necesitó abundante mano de obra africana, por eso hoy, tanto en el Callao (Perú), como Acapulco Guerrero (México) estos puertos son lugares de asentamientos de afrodescendientes (Klog:2022). Aunque hoy estamos en otro período histórico, las carencias y necesidades son consecuencias de la minería y del extractivismo colonial que dejaron secuelas hasta hoy.

En el Virreinato del Río de la Plata, el tráfico de esclavos en Asunción, Río de la Plata y Santiago de Chile se iniciaron para satisfacer la demanda de mano de obra en las minas; el comercio del sur se destinó a las actividades agrícolas o ganaderas. En el año 1500 Brasil fue colonia portuguesa, y hubo unos 6 millones y medio de esclavos, siendo Río de Janeiro y Salvador los más importantes puertos de destino.

De acuerdo con Muñoz (2013), se sacaron 1094 toneladas de productos mineros de los territorios de Minas Gerais, Goiás y Mato Groso, en el año de 1729. En 1730 se descubrió una gran veta de diamantes en la zona de Serró Frío, lo cual convirtió al Brasil en una de las regiones más ricas y extractivistas antes de la independencia (Sánchez: 2006).

La minería siempre ha estado ligada a la esclavitud, sobre todo a la africana, por tanto, cuando los esclavos lograban huir de una mina o plantación, formaban los quilombos, escondidos en zonas inaccesibles, a lo largo del siglo XVII. El quilombo más conocido y el más simbólico de América fue el de “Palmares”.

RESTITUCIÓN DE DERECHOS

La aproximación hacia las comunidades afrodescendientes existentes en América Latina y Brasil en resistencia a la minería metálica encontró que estas están ubicadas muy cerca de los lugares que fueron grandes yacimientos mineros en la Colonia; otras se ubicaron en lugares más profundos, compartiendo territorio con los pueblos originarios. Algunas están focalizadas en los grandes puertos de embarque y desembarque de la Colonia.

Respecto a la situación frente a la minería, vemos que, los afrodescendientes comparten la misma suerte que los pueblos indígenas y campesinos: las grandes empresas mineras tratan de expropiarles de sus territorios con diferentes medidas de presión.

Las organizaciones cuya identidad, visión y misión parten de la óptica afrodescendiente están focalizadas en la restitución de derechos territoriales y de identidad, y hacen frente común contra el racismo estructural y ambiental. Otras organizaciones están formando parte de un frente común en defensa de la tierra.

Actualmente los quilombos del Brasil tienen que ver con los movimientos de emancipación, libertad y resistencia a la minería. Las comunidades negras rurales, conocidas como comunidades remanentes de quilombo, formadas por familias campesinas, trabajan en torno al reconocimiento de sus propios derechos al acceso a la tierra, que son parte de la conquista y reivindicación de los movimientos negros de Brasil (Durán: 2016).

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